jueves, 28 de enero de 2016

El rey de La Habana

Hoy os contaré lo que hacía el día que descubrí la mercería de la que hablaba en mi post anterior (lo puedes leer aquí).

Había quedado con amigas para ir a ver alguna de las pelis programadas en el cine Texas (y este fue el segundo descubrimiento de la tarde, un cine que cumple con ser bueno, bonito y barato -y que tiene prohibidas las palomitas-). Y entramos a ver El rey de La Habana, que por su argumento prometía no ser una película fácil.

Y no lo fue. Calculo que no habrían pasado más de cinco minutos de proyección y ya se habían sucedido 3 muertes en una misma familia, que sirven más o menos como introducción de la historia.

¿Y cuál es la historia? Las aventuras, y más bien desventuras, de Reinaldo, un chico, el único que queda de esa familia y que al crecer, le apodan 'rey de La Habana', en parte por su nombre y en parte por estar muy bien dotado y hacer las delicias de toda cubana que se va encontrando en su periplo (tremendo pingón, no paran de repetir).

A lo largo de la película se van sucediendo diferentes y variopintas situaciones que muestran la difícil e inestable vida en la ciudad, y las relaciones que se establecen entre sus personajes principales (Rey, Magda y Yunisleidi), que transitan entre la complicidad y la necesidad, el cariño y alguna punzada de ternura. No falta la crítica más o menos velada al turismo sexual occidental.  

Aunque tiene varias escenas cómicas, algunos pasajes resultan excesivamente escabrosos e innecesariamente violentos, sumiendo al espectador en una total desesperanza según se acerca el final. Tanto, que al salir de la sala uno tiene ganas de que estén por allí los actores de nuevo vivitos y coleando para decir '¡ey, que estamos vivos!'.

Por eso mismo, unos días después les busqué y les encontré en el Festival de Cine de San Sebastián de 2015, donde la actriz Yordanka Ariosa se llevó la Concha de Plata. Ya nos había parecido que su interpretación era muy buena, y su escena poseída por el espíritu de la negra Tomasa, brillante.

Magda poseida por la Tomasa
En el Festival de San Sebastián


Leyendo un poco sobre cómo se gestó la película también me enteré de que está basada en una novela del mismo nombre escrita por el periodista cubano Pedro Juan Gutiérrez, con amplia trayectoria en obras de denuncia social de su país (no debe de ser fácil viviendo en Cuba), además de poesía. Os recomiendo visitar su página en wikipedia o la suya personal.



Para acabar os dejo la crítica que hizo El País, más extensa y detallada (por algo es una crítica profesional).

Hasta el próximo post.










lunes, 25 de enero de 2016

Tiempo de hilvanar



Encontré al azar una mercería que ya casi podría catalogarse como museo, tenía todos estos ovillitos de colores, y muchos más, a lo largo de todo el vidrio del escaparate. 


Por detrás, toda la gama de variaciones del color violeta en forma de hilo de coser (a ver quién es el guapo que conoce los nombres de todos ellos), además de varias tijeras de entre las que me llamó la atención una que he bautizado como 'tijeras pelícano'. 
  

Han pasado ya unos días y me dio por pensar que todo ese hilo podría servir para empezar a hilvanar este nuevo año, que según dicen los números es 9, cierre de ciclo, de introspección y reflexión. Perfecto entonces ir dando unas puntadas.




Porque lo que yo andaba haciendo en ese lugar donde me topé con este retazo de vida de otros ritmos lo contaré otro día.